Migrantes refugiados en el albergue Ágape, presentaron una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), con sede en Tijuana, luego de que un grupo armado irrumpiera en el lugar en el que se resguardan, sin que la Guardia Nacional ni la Secretaría de Gobernación atendieran el llamado de auxilio que se les hizo a través del botón de pánico.
Encabezados por el pastor Alberto Rivera Colón, el grupo de migrantes presentaron la queja, al tiempo que ratificaban otras quejas presentadas por la inacción de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California de denuncias interpuestas por maltrato y violencia de familiares.
Rivera Colón hizo un llamado a las autoridades para que provean la vigilancia que se comprometieron a proporcionar tanto al albergue que dirige como al resto de los refugios de migrantes.
“Tenemos muy mala experiencia por parte de México, falta de reacción cuando se les llama a las autoridades, por eso se han levantado las autodefensas -en estados como Michoacán- y queremos evitar que algo así vaya a pasar en Baja California”, advirtió.