Tijuana.- Sin reajuste presupuestal, el presupuesto de egresos de Tijuana, tasado para 2022 en 8 mil 597 millones de pesos, continuará destinándose a partidas de gasto corriente, rezagando la obra pública y servicios básicos como la recolección de basura, que dependen de contratos de arrendamiento desventajosos para el municipio, opinó el abogado fiscalista, Adolfo Solís Farías.
Aunque el gobierno que encabeza Monsterrat Caballero subrayó que privilegiará obra pública como “la rehabilitación y mantenimiento (bacheo), reencarpetado y pavimentación con mezcla asfáltica caliente y concreto hidráulico en bulevares y vialidades de primer orden y con mayor tránsito en el municipio, para este rubro sólo aprobó un incremento de 1.1 millones de pesos a los 620.9 millones de pesos autorizados en el ejercicio 2021.
“Lamentablemente no hay más dinero para obra pública, lo que significa que vamos a seguir estancados con la carencia e ineficiencia que hasta hoy tenemos, lo que es muy preocupante, porque el presupuesto no ha tenido un ajuste radical, donde hagamos un cambio o una reestructura de partidas”, expuso.
Anotó que con un presupuesto de alrededor de 5 mil millones de pesos solo para el gasto de nómina, a lo que se suman otros gastos operativos, la cuenta corriente termina absorbiendo la mayor parte del gasto.
"Mientras tengamos esa absorción de la cuenta corriente no podemos hacer planes, ni grandes proyectos, no podemos invertir más en seguridad, salud, educación, ni servicios públicos", añadió.